La tiradora malaya Nur Suryani Mohd Taibi protagonizó otra historia de superación de la mujer después de competir en la prueba de carabina de 10 metros embarazada de ocho meses. Otras deportistas habían participado encintas en unos Juegos Olímpicos, pero ninguna en un estado de gestación tan avanzado como el de la tiradora malaya.
Nur Suryani consiguió plaza para los Juegos Olímpicos de Londres en la modalidad de carabina de 50 metros en tres posiciones en los Campeonatos de Asia de 2011 antes de quedarse embarazada pero, por consejo médico, tuvo que cambiar de prueba ya que en esta es necesario tirar de pie, de rodillas y tumbada, algo que no era posible en su estado. Así, participó finalmente en la modalidad de carabina de aire comprimido de 10 metros.
La tiradora malaya quiso dejar claro que su participación en los Juegos Olímpicos no perjudicaba la salud de su bebé y que, en tal caso, hubiera antepuesto el bienestar de su hija a cumplir su sueño olímpico.
En la competición, Nur Suryani no estuvo cerca de las mejores marcas que acreditaba y terminó en el puesto trigésimo cuarto, lejos de las posiciones que daban acceso a la final. Tras la prueba, la tiradora malaya afirmaba que el bebé estuvo tranquilo y que no le había influido en su rendimiento ni en los entrenamientos ni en la clasificación.
En esta ocasión, su bebé no había venido con un pan debajo del brazo pero la fuerza de voluntad y el afán de superación que demostró su madre hacen que sea ya una protagonista más de la historia del olimpismo.